No es novedad que todos los deportes debieron suspenderse por la rápida propagación del coronavirus alrededor del mundo. Primero fue el fútbol, después el basquet, el tenis y las distintas competencias de los países tambien debieron ser reprogramadas como la Copa Davis, Copa Libertadores, Copa América.
Todas estas medidas fueron tomadas para cuidar la salud de los deportistas y el público en general y fue muy bien recibida por todos ya que en los últimos días los casos confirmados por el virus aumentan a pasos agigantados y todos temen por su salud.
El Comité Olímpico Interncional se tomará aproximadamente un mes para poder debatir y definir una nueva fecha, que hasta el momento se especula con que sea en la época de otoño de Tokio entre 2021 y 2022. Además deberán solucionar los problemas contractules ya que Japón invirtió aproximadamente 35.000 millones de euros y un presupuesto de organización cercano a los 12.000 millones.
Esta decisión fue tomada por el COI ya que vieron que los torneos clasificatorios se vieron afectados de tal manera que el 43% de las plazas que debían ser ocupadas por los deportistas todavía se encontraban vacantes.
Solo 24 horas fueron necesarias para que el Presidente del COI se sienta presionado por el mundo entero y cambie de opinión respecto a la continuidad de los Juegos ya que el sábado había declarado que "No se pueden posponer los Juegos como si fueran un partido de fútbol".